Una mujer llega al consultorio del terapeuta llorando; ha pasado los dos años anteriores viviendo toda su vida con el terror de conducir. Una hora después está entusiasmada por conducir y, una semana después, regresa sonriendo y dice que ha estado conduciendo toda la semana y se siente fantástica.
¿Cómo fue esa hora? Una sesión de EFT suave y productiva. Según algunos relatos, pueden ser necesarias varias sesiones para resolver el dolor persistente, la ansiedad, los ataques de pánico o las ansiedades que surgen de un trauma pasado.
La duración del tratamiento es mucho menor que la de las terapias estándar, incluso en situaciones de trauma realmente severo, que pueden tardar años en ser abordadas adecuadamente. A una de nuestras clientas de EFT le diagnosticaron un trastorno mental como resultado de un abuso infantil severo. Recibió tratamiento durante 23 años, pero sus síntomas de TEPT persistieron. Sus síntomas de TEPT desaparecieron por completo después de ocho años más de EFT y otras técnicas de Psicología Energética, y ahora ha tenido un crecimiento "postraumático" significativo.
La lección de esta experiencia es que la EFT puede funcionar maravillosamente, independientemente de lo difíciles y molestos que sean los síntomas. Aunque las historias y las sesiones varían mucho, todas se caracterizan por el uso exitoso de la EFT. La EFT es una técnica asombrosa y transformadora.
El "tapping" o EFT (Técnicas de Liberación Emocional) es una técnica de autoayuda para el cuerpo y la mente. Combina la atención verbal y cuidadosa a las ideas y sentimientos con un toque suave. EFT consiste en dar golpecitos suaves en puntos de acupuntura de las manos, la cara y el cuerpo con las yemas de los dedos mientras nos concentramos brevemente en un problema que queremos abordar.
Con la ayuda de la EFT, podemos cambiar y dejar ir las emociones negativas que pueden estar interfiriendo con nuestra experiencia, como el dolor, la culpa, el miedo o la rabia. Las ideas y creencias que subyacen a nuestras experiencias emocionales también pueden cambiarse con el uso de la EFT. Las personas con frecuencia describen sentirse más livianas, más tranquilas y capaces de respirar con más libertad después de solo unas pocas sesiones de tapping; es casi como si tuvieran más espacio en su interior. Podrían decir que se sienten mejor en general, que tienen nuevas ideas o que su forma de pensar ha cambiado.
El impacto que la EFT tiene con frecuencia en el cerebro es otro factor que contribuye a su eficacia.
Las áreas de "supervivencia" del cerebro, que albergan nuestro instinto de lucha o huida, reciben señales cuando se estimulan los puntos de acupuntura con agujas, según los escáneres cerebrales como la resonancia magnética funcional (fMRI). Dado que estas regiones cerebrales carecen de conexiones neuronales directas con los centros del lenguaje lógico, las palabras no pueden llegar a ellas por sí solas.
La EFT, que combina la estimulación de puntos de acupuntura y los golpecitos, podría acceder al sistema de instinto de supervivencia del cerebro y ayudar a reprogramar nuestras respuestas allí. Muchas modalidades no ofrecen esta funcionalidad.
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